sábado, 6 de agosto de 2011

La capa de hielo ártico disminuye hasta casi mínimos históricos





La capa de hielo en el Ártico ha disminuido casi hasta mínimos históricos debido a las altas temperaturas de los últimos meses, según informa el Centro Meteorológico de Rusia (CMR).
En estos momentos el hielo ártico cubre una superficie de 6,860 millones de kilómetros cuadrados, cerca del mínimo registrado en 2007, señala el CMR en su página web.
Todos los mares árticos rusos se encuentran por debajo de la norma en lo que se refiere a su superficie helada desde las aguas de la parte europea de Rusia al mar de Chukotka, frente a la península de Alaska.
En concreto, la superficie de hielo en la zona suroccidental del mar de Kara está un 56% por debajo de la norma, mientras en el caso del mar de Chukotka este porcentaje es del 35%.
Por esta razón, las condiciones para la navegación por las aguas árticas son consideradas "muy buenas", tendencia que se mantendrá hasta septiembre.
El CMR informa de que durante este mes casi todas las rutas árticas están libres para la navegación de buques que no sean rompehielos.

Ruta marítima ártica

La reducción de la capa de hielo que cubre el océano Glacial Ártico debido al calentamiento global ya permitió en 2010 que un petrolero ruso reabriera la ruta marítima ártica, alternativa al canal de Suez y que estaba cerrada al tráfico comercial.
Un barco mercante procedente de Europa Occidental necesita casi la mitad de tiempo para llegar a Asia a través de la ruta ártica que por el canal de Suez, con el consiguiente ahorro de combustible.
Según algunos expertos, el progresivo deshielo debido al ascenso de las temperaturas conducirá a que este océano hacia 2040 quede en verano totalmente despejado, lo que permitirá prescindir de los rompehielos.
Los barcos pueden viajar todo el año entre Murmansk y la isla de Nueva Zembla, pero cuando se acaba el mar de Bárents y comienza el de Kara, los hielos eternos dificultan enormemente la navegación.
Tras superar el mar de Kara, los barcos aún deben surcar las aguas heladas de los mares de Laptev, Siberia Oriental y, por último, el de Chukotka.
Rusia es el único país del mundo que cuenta con una flota de rompehielos atómicos, por lo que tendría el monopolio de la ruta.
Vía: RTVE

EEUU concede permiso a Shell para operar en Alaska





La petrolera anglo-holandesa Royal Dutch Shell acaba de recibir el visto bueno para iniciar su exploración en el mar de Beaufort (Alaska) en los meses de junio y septiembre del verano de 2012. La Oficina de Gestión y Regulación de Energía Oceánica (BOEMRE, por sus siglas en inglés) de EE.UU le ha concedido el permiso.
La BOEMRE indicó que había otorgado el visto bueno a Shell tras examinar su Estudio de Impacto Medioambiental, que exige que los operadores demuestren que son capaces de controlar una potencial explosión y derrame de crudo.
"Basamos nuestras decisiones acerca de la exploración energética en el Ártico según la mejor información científica disponible", afirmó en un comunicado el director de la agencia federal, Michael R. Bromwich. Añadió que revisarán y vigilarán "de cerca" las actividades de Shell para asegurar que sus operaciones se llevan a cabo de un modo seguro y responsable desde el punto de vista medioambiental".
La compañía, que estaba en espera desde que compró las licencias para operar en aguas frente a la costa norte de Alaska en 2005 y 2007, ya ha invertido más de 3.500 millones de dólares en el proyecto. Entre los planes de Shell, está la exploración de 10 pozos tanto en el mar de Beaufort como en el de Chukchi, más al oeste y para el que aún debe obtener el permiso, con la meta de comenzar a extraer petróleo a finales de la década.
La aprobación por parte de las autoridades de EE.UU supone un paso más en la progresiva reapertura de las operaciones aguas afuera por parte de las compañías petroleras.
En junio de 2010, tras la explosión de la plataforma DeepWater Horizon de BP que liberó 4,9 millones de barriles en aguas del Golfo de México y, en la que murieron 11 trabajadores, la Administración del presidente de EE.UU, Barack Obama, decretó una moratoria que prohibía la perforación en costa afuera en pozos a más de 150 metros de profundidad.
En marzo pasado, el secretario del Interior de EE.UU, Ken Salazar, anunció la aprobación del primer permiso dado a una compañía petrolera para perforar en el Golfo de México desde la catástrofe del DeepWater Horizon.
En los últimos meses han aumentado las presiones de la industria petrolera para que se retomen las actividades con el argumento de estimular la economía estadounidense.
Vía: El Mundo