sábado, 26 de diciembre de 2009

Este lunes presentarán la tercera fase del proyecto de construcción una planta para la captura de CO2


Las compañías Hunosa y Endesa presentan el próximo lunes, 28 de diciembre, la tercera fase del proyecto de construcción de una planta experimental de 1MW para la captura de CO2 en Asturias, que será promovida en La Pereda (Mieres), junto al actual Grupo Termoeléctrico.

Este proyecto lo desarrollan Hunosa y Endesa Generación, junto con el INCAR, además de la colaboración de 'Foster Wheeler' como socio tecnológico.

Según informó la organización del evento en nota de prensa, la presentación se llevará a cabo en la sede del Instituto del Carbón (Incar), ubicada en La Corredoria (Oviedo).

El acto dará comienzo a las 11.30 horas en la sede del Incar, y asistirán, entre otros, el presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Enrique Martínez Robles; el presidente del Grupo Hunosa, Juan Ramón García Secades; el director general de Endesa Generación, Manuel Morán; el presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Rafael Rodrigo; y Antonio Castilla Oliver en representación de Foster Wheeler. También asistirán representantes de los sindicatos SOMA-FIA-UGT y CC.OO.

Pilas Recargables; Menos contaminantes


Según la Agencia francesa para el Medioambiente y el Control de la Energía (ADEME), dos de cada tres pilas y baterías no se reciclan. La mayoría de los 800 millones de pilas (27.000 toneladas) consumidas cada año en Francia acaban en los vertederos. Los metales pesados que contienen tanto pilas como baterías llegan hasta nuestros alimentos remontando la cadena alimentaria.

Por suerte, esta contaminación se puede limitar mediante pequeños gestos muy simples, especialmente utilizando pilas recargables. Según su calidad, una pila recargable sustituye aproximadamente de 200 a 1.000 pilas de usar y tirar. Si sustituyéramos todas las pilas de usar y tirar por pilas recargables evitaríamos la producción de 330.000 toneladas de residuos tóxicos en el mundo, 100.000 toneladas en Europa.

Según un estudio realizado en 2007 por el Centro de Investigación sobre Salud y Medioambiente “Bio Service”, las pilas recargables causan un impacto sobre el medioambiente 32 veces menor que las pilas normales. El estudio compara el impacto de 1 Kwh de energía suministrado por dos tipos de pilas: una recargable Ni-MH 2.500 mAh y su cargador, y una alcalina 2.500 mAh. Durante el análisis del ciclo de vida se tuvieron en cuenta cinco indicadores clave: consumo de recursos naturales, emisión de gas de efecto invernadero, contaminación por ozono, acidificación del aire y contaminación del agua.

Impacto de una pila recargable comparado con una de usar y tirar:

- 30 veces menos contaminación del aire por ozono

- 28 veces menos gas de efecto invernadero (relacionado con la fabricación y la distribución de las pilas de usar y tirar)

- 23 veces menos recursos naturales no renovables (es necesario fabricar más pilas de usar y tirar para almacenar la misma cantidad de energía)

- 12 veces menos contaminación del agua

- 9 veces menos impacto sobre la acidificación del agua

Desde el punto de vista económico, las pilas de usar y tirar son una ruina para el consumidor y para la sociedad. Al consumidor le basta con realizar de 4 a 6 recargas para amortizar la diferencia de precio de una pila recargable (incluyendo el cargador).Para la sociedad, según un estudio realizado en 2005 por la Dirección de estudios Económicos y Evaluación Medioambiental (D4E) del Ministerio de Ecología francés, se estima que “recoger y reciclar las pilas de usar y tirar y los acumuladores es injustificable económicamente ”. El reciclaje de pilas supone un gasto demasiado elevado para la colectividad y una fuente contaminante cuya erradicación es simple y eficaz.

Via: GreenIT