martes, 10 de noviembre de 2009

Google apuesta por investigar en las energías renovables


Google ha decidido ensanchar sus horizontes y subirse decididamente a la revolución energética. El gigante de internet formuló hace dos años una utópica ecuación (RE-C) y ha reclutado cerebros de todo el mundo para avanzar a todo tren hacia la meta: Renovables más baratas que el Carbón.

"Existe una gran posibilidad de llegar a ese punto de inflexión en cinco años", anticipa a EL MUNDO Bill Weihl, el cerebro verde de Google. "Puede que tardemos algo más, pero estamos decididos a apostar por ideas innovadoras en todo el abanico de las renovables".

A través de su rama filantrópica, Google.org, la compañía destinó el año pasado 45 millones de dólares a la investigación en energía solar térmica, eólica y sistemas geotérmicos mejorados (EGS). También ha invertido en 'startups' como eSolar o BrightSolar, y en los últimos meses se ha lanzado al campo de la eficiencia energética con el PowerMeter, un software que permite controlar desde un ordenador portátil (y en el futuro, desde un teléfono móvil) el consumo energético en los hogares en tiempo real.

La reconversión de Google empezó desde dentro. La llegada a Mountain Valley de Bill Weihl, ex profesor del Instituto Tecnológico de Massachussetts, se tradujo en el rediseño del centro de datos (con un ahorro del 50% de la energía) y en la instalación de uno de los mayores tejados solares de EEUU, con placas fotovoltaicas capaces de generar 1,6 megavatios.

El propio Larry Page, cofundador de Google, entró en la dinámica y anunció su intención de "aplicar la misma creatividad e imaginación al reto de generar energía renovable a gran escala". El reto, anunció, es llegar a producir un gigavatio de energía limpia (suficiente para abastecer San Francisco) a un precio más barato que el carbón.

La función de Weihl, elevado a la categoría de zar de energía verde de Google, consiste ahora en acelerar esa búsqueda, con la mirada puesta en la energía termosolar. Su objetivo es reducir un 50% o incluso un 75% el coste de los heliostatos (o espejos) usados para llevar a ebullición el agua y generar electricidad con vapor. Google está experimentando con materiales innovadores e intentando maximizar la eficiencia de otros componentes del sistema para cruzar la frontera de los cinco centavos por kilovatio/hora.

"Se trata de un programa piloto y aún no hay resultados" , advierte Weihl, que no oculta su deseo de ver al Gobierno invirtiendo de 20.000 a 30.000 millones de dólares en ideas de alto riesgo en renovables. "Obama ha dado un primer paso hace 15 días, cuando destinó 137 millones de dólares a 37 universidades y empresas que trabajan en I + D, pero hace falta más dinero si queremos combatir el cambio climático".

Mientras se resuelve la ecuación, Google ha puesto todas las energías en el proyecto PowerMeter, que arranca en unos meses en Estados Unidos, Alemania, India y Canadá. Es un software que, usando dispositivos caseros o las redes inteligentes de las eléctricas, podrá informar del consumo energético de casa minuto a minuto. "La factura eléctrica ha sido siempre un punto oscuro para los consumidores", afirma el padre de la idea, Ed Lu, ex astronauta de la NASA e ingeniero-jefe de Google. «Con el PowerMeter somos capaces de visualizar el gasto y corregir malos hábitos energéticos».

Lu abre de su portátil y hace el chequeo a distancia de las últimas 24 horas de consumo en su propia casa, en Silicon Valley. "La información será una de las claves de la próxima revolución energética", vaticina. "Imagina el efecto multiplicador de millones de hogares ahorrando el 15% de energía todos los meses".

Predicar con el ejemplo

El cuartel general de Google en Mountain View (California) es lo más parecido a un campus universitario, diseñado con los máximos criterios de eficiencia energética, gestión de residuos y aprovechamiento del agua, lugares de esparcimiento y descanso para los trabajadores, zonas de picnic e incluso un huerto de hierbas aromáticas de todo el planeta.

En el tejado del edificio principal está instalada una de las mayores superficies de placas fotovoltaicas en suelo comercial de Estados Unidos, con capacidad para general 1,6 megavatios, suficiente para abastecer unos 1.000 hogares. Las placas solares aportan el 30% de la energía en el edificio. Además, los trabajadores tienen gratis a su disposición una flota de ocho coches híbridos que se recargan en el garaje 'solar'.

La compañía estimula el uso de la bicicleta, con donaciones de cinco dólares diarios a los trabajadores que se desplacen hasta la oficina en dos ruedas (el dinero se destina a una ONG de su elección). Los trabajdores disponen además de una flota gratuita de más de un centenar de bicicletas en el campus.

Para los que prefieren el transporte sobre ruedas hay un flota gratuita de autobuses con biodisel, utilizada por más de 1.500 trabajadores.

El centro de datos también ha sido rediseñado con los máximos criterios de eficiencia y con un ahorro del 50% de la energía. Más de 200 trabajadores participaron en un experimento interno para el ahorro energético usando el PowerMeter. El ahorro per cápita osciló entre el 10% y el 15%. La compañía estimula el uso eficiente de los ordenadores. Según sus cálculos, cada búsqueda en Google libera el equivalente a 0,2 gramos de CO2.

Via: El Mundo

La planta de biogás "más grande del mundo" funcionará a pleno rendimiento a principios de 2010


EnviTec Biogás ha emprendido ya la fase final de la puesta en marcha de la planta de Güstrow (Alemania). Con una potencia de 55 MW, esta planta emplea una tecnología mediante la cual eleva la calidad del biogás hasta hacerlo apto para su inyección en las redes de distribución de gas natural. La producción potencial de Güstrow, que es calificada por EnviTec como "la planta más grande del mundo", puede cubrir "las necesidades de un pueblo de 50.000 habitantes".

Situada en el länder alemán de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, la planta, cuya construcción comenzó en noviembre de 2007, ha sido promovida por la compañía Nawaro BioEnergie y planificada y construida por EnviTec Biogás. Güstrow, en cuyas obras han participado 160 operarios, se asienta sobre una superficie de veinte hectáreas y ha demandado una inversión de 42 millones de euros. La planta comenzó a funcionar el pasado tres de junio iniciando un "proceso de puesta en marcha" que concluirá a principios de 2010, según EnviTec.

La planta de Güstrow procesa en veinte digestores la materia prima que recibe: maíz, otros cereales y hierba que aportan granjeros radicados en un radio de cincuenta kilómetros. Según EnviTec, el objetivo de Nawaro BioEnergie es verter en la red de gas natural, a principios de 2010, 46 millones de metros cúbicos anuales de biogás, lo suficiente como "para cubrir las necesidades energéticas de una ciudad de 50.000 habitantes". La producción de Güstrow, señala EnviTec, "equivale a 160 millones de kilovatios hora de electricidad y 180 de calor".

Según EnviTec, ingeniería asimismo responsable de la hasta ahora mayor planta de biogás del mundo, Penkun, también en Alemania (20 MW), la tecnología que usa Güstrow para convertir el biogás en biometano (equivalente del gas natural) "elimina en una primera fase una gran parte de dióxido de carbono (CO2), comprimiendo el gas y enfriándolo posteriormente; para, a continuación, separar el CO2 y el sulfuro de hidrógeno con ayuda de agua; consiguiendo así que el contenido de metano en el biogás aumente de un promedio del 55% a por lo menos el 97%".

El biogás de Güstrow –combustible vegetal producto de la descomposición natural de materiales orgánicos– alcanza gracias a ese proceso unas cualidades similares a las del gas natural (el combustible fósil) y por ello "puede ser almacenado en depósitos de gas, transportado por las tuberías ya existentes y empleado donde requiera el consumidor o usado como combustible en vehículos". Según el director de Güstrow, Felix Hess, “si queremos lograr un suministro seguro y fiable de energía por medio de fuentes renovables, plantas como la de Güstrow son indispensables”.

Según la ingeniería alemana, "para 2020, la Unión Europea podría reducir a la mitad sus importaciones de gas natural gracias al biogás". En este sentido –añade EnviTec– el gobierno alemán se ha puesto el objetivo "de hacer llegar seis millones de metros cúbicos de biometano a la red de gas natural para el año 2020. Esto, según la Agencia Alemana de la Energía (Dena), supondría contar con 2.000 nuevas plantas de biogás para dicho año; siendo en la actualidad sólo veinte las plantas que producen biometano".

Via: Energías Renovables

Medio Ambiente aprueba las obras de emergencia para salvar Las Tablas


El consejo de ministros ha dado el visto bueno a las obras de emergencia que el MARM está llevando a cabo para solucionar la combustión de turba en el subsuelo del parque. El manejo del sistema hídrico es la principal actuación que se llevará a cabo.

Para realizar la aportación de agua al parque se está construyendo una conducción de abastecimiento desde el acueducto Tajo-Segura hacia la Llanura Manchega. De esta obra faltan aún unos 40 kilómetros.

Ante la grave situación en la que se encuentra el parque, se han estudiado alternativas tales como mejorar el rendimiento de los posibles trasvases hacia el parque nacional. De entre las ideas aportadas, la más idónea es que teniendo en cuenta que la conducción está en ejecución, habría que incorporar recursos de los cauces del río Valdejudios y del Cigüela.

Otras actuaciones

De manera simultánea habría que construir una estación de bombeo para salvar la diferencia de cotas de agua entre los diferentes puntos del parque. Para ellos se necesitaría ocupar temporalmente algunas fincas particulares, por lo que se debería hacer una expropiación de bienes.

Obras

Con estas actuaciones, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino invertirá más de nueve millones de euros.

Con el trasvase de agua hacia el parque se podría aportar agua a los lugares que se precisen inundar para lograr extinguir los incendios internos de turba.

Las actuaciones planteadas, tienen que ver con la construcción de nuevas infraestructuras y/o la mejora de las ya existentes. Entre ellas está la creación de veinte sondeos, sistemas de bombeo, tuberías y alimentación eléctrica.

La ejecución de las obras tendrá un plazo de tres meses, y las instalaciones entrarán en funcionamiento a medida que se vayan terminando, con lo que, desde el inicio de las obras, cada semana se debería estar bombeando con tres bombas nuevas.

Via: Ambientum